
Se prevé que la mayoría de las personas se recuperarán sin necesidad de atención médica.
Si tiene una enfermedad grave o si tiene un alto riesgo de tener complicaciones por la influenza, contacte a su proveedor de cuidados médicos o busque atención médica. Su proveedor de atención médica determinará si es necesario hacerle pruebas de detección de la influenza o darle tratamiento. Tenga en cuenta que si la influenza se propaga en forma generalizada, habrá poca necesidad de hacerle pruebas a las personas, por lo que es posible que su proveedor de atención médica decida no hacerle pruebas para la detección del virus de la influenza.
Los medicamentos antivirales se pueden administrar para el tratamiento de aquellas personas gravemente enfermas con influenza. Estos medicamentos antivirales son medicamentos recetados (comprimidos, en forma líquida o en inhalador) que combaten los virus de la influenza, incluidos los de la influenza H1N1. Estos medicamentos deben ser recetados por un proveedor de atención médica.
Existen dos medicamentos antivirales contra la influenza que se recomiendan para el uso contra la influenza H1N1. Estos medicamentos que se usan para tratar la influenza H1N1 se llaman oseltamivir (nombre comercial Tamiflu®) y zanamivir (Relenza®). Al propagarse la influenza H1N1, podría haber escasez de estos medicamentos antivirales. Por lo tanto, estos medicamentos se administrarán primero a aquellas personas hospitalizadas o que tienen riesgo alto de complicaciones. Los medicamentos actúan mejor si de administran entre los dos días de la aparición de la enfermedad pero se pueden usar después, si la enfermedad es grave o se presenta en personas con un alto riesgo de tener complicaciones.
No se debe suministrar aspirina o productos que contengan aspirina (p. ej. subsalicilato de bismuto – Pepto Bismol) a ningún caso, presunto o confirmado, de infección por el nuevo virus de la influenza tipo A (H1N1) que tenga 18 años de edad o menos debido al riesgo de sufrir el síndrome de Reye. Para aliviar la fiebre, se recomienda el uso de otros antipiréticos como el acetaminofeno o medicamentos antiinflamatorios no esteroideos. Para obtener más información sobre el síndrome de Reye, consulte el sitio web de los Institutos Nacionales de la Salud (en inglés).
Revise los ingredientes en las etiquetas de los medicamentos contra el resfriado y la influenza que se venden sin receta médica para ver si contienen aspirina.
Los adolescentes que tienen influenza pueden tomar medicamentos sin aspirina, como acetaminofeno (Tylenol®) e ibuprofeno (Advil®, Motrin®, Nuprin®), para aliviar los síntomas.
Los niños menores de 4 años de edad no deben tomar medicamentos para el resfriado que se venden sin receta médica sin que se consulte primero con un proveedor de atención médica.




